La estrategia Capullo, implementada por el Ministerio de Salud tendrá como objetivo proteger al recién nacido y a lactantes menores contra la tos convulsiva, tos ferina o Coqueluche.
Para ello se inoculará, con vacuna acelular (Tdap) a todas las personas de 12 o más años que habiten en el mismo domicilio del recién nacido, por ejemplo, (padres, hermanos, abuelos), para producir un efecto de barrera en la transmisión de la enfermedad al lactante.
Del mismo modo, deberá vacunarse a las puérperas, o sea, a las mujeres que hayan dado a luz recientemente (45 días a seis semanas) y también a las cuidadoras que convivan todo el día con el recién nacido.De igual manera, se vacunará al personal de salud en contacto con recién nacidos y lactantes, (neonatología, pediatría y sus respectivas UCI).
No se vacunará a los recién nacidos en esta campaña de reforzamiento, puesto que lo harán según calendario habitual del Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) a los 2,4 y 6 meses de edad.Las vacunas que se utilizarán contienen toxoide diftérico, toxoide tetánico, y componentes de la tos ferina.
Se estima vacunar a una población de 336 mil personas. La campaña se extenderá por 6 meses a partir del 01 de marzo de 2011.
Antecedentes Coqueluche
El Coqueluche o tos ferina es una enfermedad infecciosa bacteriana aguda que afecta al tracto respiratorio. La vacunación sistemática de la población pediátrica contra este mal, se incluyó en el Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) en 1974 en nuestro país.
Desde aquel tiempo se le suministran dosis de la vacuna pentavalente a los menores de 2, 4, 6 meses de edad y refuerzos a los 18 meses y 6 años de edad.
Justamente esta vacunación sistemática que impide que la infección se desarrolle en la población más vulnerable, generó un cambio en el perfil epidemiológico de la enfermedad, ya que son los adultos y los adolescentes quienes tienen más riesgo de contagiarse, lo que en estos casos no es grave.
Sin embargo, ese antecedente, sumado al hecho de que la vacunación confiere protección hasta en unos 10 años, explicaría por qué reaparece el Coqueluche en ciclos endémicos cada 3 o 4 años.
De hecho, en 2010 se detectó un aumento de casos notificados, lo que elevó la tasa de incidencia nacional en 2011 a 14,6 por cien mil habitantes, triplicando la tasa del año anterior. De estas el 51 por ciento corresponden a menores de un año, y el 79 por ciento de este grupo son menores de seis meses de edad.
Este aumento de casos se detectó particularmente en la región del Bío Bío, por lo que se implementó la estrategia Capullo desde el 18 de diciembre de 2011.