La Comisión Mixta del Congreso Nacional se constituyó la tarde de ayer martes 8 de octubre para resolver el destino del proyecto de ley de medicamentos, iniciativa que se inicia su cuarto trámite legislativo y que deberá dirimir si será obligatorio o no, para quien prescribe un fármaco, consignar o no el nombre del principio activo; y, por otro lado, si se mantendrá la autorización para que se puedan vender medicamentos que no requiere recetas en lugares que no sean farmacias o almacenes farmacéuticos.
El director del Instituto de Salud Pública de Chile, Stephan Jarpa Cuadra fue especialmente invitado a esta sesión, oportunidad en la que reiteró que “el aprobar la ley de fármacos es crucial para los intereses de los pacientes, dado que a través del Petitorio Mínimo, será obligatorio que las farmacias tengan disponibilidad todos los medicamentos bioequivalentes, respecto de los cuales el Instituto de Salud Pública de Chile ha garantizado su calidad, seguridad y eficacia”.
Agregó que “Estamos optimistas en que la ley pueda ser sancionada por los parlamentarios antes que se inicie el receso legislativo el próximo 21 de octubre con motivo de las elecciones parlamentarias y presidencial. De no ser así, el trabajo se retomaría a partir de 19 de noviembre, asegurándonos de igual forma un margen de confianza en que los pacientes podrán contar con esta nueva ley antes del 31 de diciembre próximo”, expresó.
La iniciativa ingresó esta semana para su análisis al interior de la Comisión Mixta tras cumplir su tercer trámite legislativo, y está integrada por los senadores Francisco Chahuán, Guido Girardi, Fulvio Rossi, Mariano Ruiz-Esquide y Gonzalo Uriarte. En tanto, por la cámara baja participarán los diputados Karla Rubilar, Javier Macaya, Ernesto Silva, Marco Antonio Nuñez y Víctor Torres.
El director del Instituto de Salud Pública de Chile, Stephan Jarpa Cuadra manifestó estar convencido que los derechos de los pacientes están en primer lugar “Y es por eso que quiero confirmar lo que ya ha venido señalando el ministro Mañalich, en el sentido que el Gobierno realizará todo lo que esté a su alcance, y va a desplegar todas las acciones posibles para que el proyecto se apruebe como se presentó”.
En qué está el proyecto
Durante la primera semana de septiembre el Senado sometió a votación las recomendaciones contenidas en el informe de la Comisión de Salud del hemiciclo, que analizó las modificaciones a lo sancionado antes en la Cámara de Diputados.
Los senadores insistieron a favor de la propuesta de que las recetas deben consignar el nombre del principio activo del medicamento prescrito, y que los productos no sujetos a prescripción puedan ser vendidos en recintos que no sean farmacias.
Consenso produjeron también, la apertura de acceso a los medicamentos, el aumento de competencia para reducir costos, el mejoramiento de la información del contenido de los medicamentos mediante la incorporación del principio activo en la receta, y el fraccionamiento de los compuestos en virtud del tratamiento efectivo.
Sin embargo, no hubo consenso en la llamada “integración vertical”, en virtud de la cual se prohíbe la prestación de servicios por parte de tecnólogos médicos especializados en oftalmología. Asimismo, se sugirió que exclusivamente las farmacias y almacenes farmacéuticos sean los encargados de la venta de fármacos, situación que sólo fue cuestionada en el caso de las localidades más apartadas.
En esa oportunidad, la Sala resolvió con 26 votos a favor despachar los artículos aprobados por la Comisión de Salud de la misma cámara en forma unánime.
Asimismo, con 15 votos a favor y 13 en contra, se eliminó el inciso que establecía contar con datos poblacionales a la hora de definir la instalación de farmacias y sus turnos. Respecto a los cambios rechazados por la Comisión de Salud, y reafirmando la propuesta original del Ejecutivo en el sentido de indicar en la prescripción médica en nombre del principio activo, la Sala respaldó esa decisión por 27 votos a favor.