La seguridad química es la prevención de los efectos adversos, para el ser humano y el ambiente, resultado de la producción, el almacenamiento, el transporte, el manejo, el uso y desecho de productos químicos.
El Instituto de Salud Pública de Chile es el responsable de realizar estudios para mantener la seguridad de productos como con juguetes y artículos de uso escolar (sólo en el área de propiedades químicas no para el área mecánica), contaminantes orgánicos persistentes (COP´s), contaminantes toxicológicos ambientales, que se realiza con distintas entidades públicas y privadas como SEREMIS, Tribunales de Justicia, Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Policía de Investigaciones (PDI), Carabineros de Chile y particulares.
El espectro analítico inorgánico son principalmente arsénico y metales pesados, en el aspecto orgánico son los plaguicidas, hidrocarburos volátiles y aditivos industriales.
Estos estudios finalizan en informes técnicos con sus análisis correspondientes, con las conclusiones y sugerencias que se remiten a las autoridades correspondientes.
Juguetes
En el caso de los juguetes estos han sido controlados por el Instituto de Salud Pública de Chile en conjunto con el MINSAL, de acuerdo a lo indicado en el D.S. 114 Reglamento de Juguetes del MINSAL . En dicha normativa se define el concepto de juguete y cuales son considerados como tales y cuales no, se establecen los máximos permitidos de tolueno y de siete tipos de metales pesados. Para conocer los máximos permisibles de plomo revisar Decreto Supremo 374 /1997 del MINSAL, establece como máximo permitido en pinturas para plomo, 600 mg por kilo de producto.
Durante los últimos años, el Instituto de Salud Pública de Chile ha realizado cursos específicos a profesionales de las SEREMIS de Salud, SERNAC y privados en este tema, con el propósito de unificar criterios en el control y regulación de juguetes.
Artículos Escolares
Los artículos escolares requieren ser controlados debido a que en su fabricación se utilizan pigmentos que podrían contener plomo. Estos artículos al ser manipulados por niños, ya sea por contacto con las manos o por llevarlos a la boca, pueden ceder plomo y contaminar a los niños.
La vigilancia que se realiza depende de las características de los distintos artículos, como acuarelas, plasticina, pinturas, témperas.
Están comprobados los efectos dañinos del plomo sobre el ser humano, alteraciones gástricas, motoras y muy especialmente retardo intelectual a los niños.
Se han realizado diversos estudios en el ISP, para determinar la presencia y la cantidad de plomo en artículos escolares. Los resultados de estos estudios son enviados a la autoridad sanitaria, quien aplica las sanciones a los infractores de la normativa.
La Resolución 374 /1997 del MINSAL, establece como máximo permitido en pinturas para plomo, 600 mg por kilo de producto.